Primer acto:
Me he liado, y eso es peligroso: he comprado una lente de 60mm acromática, focal muy corta, creo que 200mm, y voy a hacer un pequeño refractor con tubo de PVC. Mi objetivo: que no salga por más de 40€, sea útil y quede bien manufacturado.
Cómo es un experimento me he autoconvencido creándome varias excusas: que si será una guía para mí 200mm, que si puedo hacer más y regalárselos a los sobrinos… excusas, excusas, excusas…es el veneno del proyecto que se me ha metido dentro.
De momento, unos bocetos;
Segundo acto:
Recibí la lente, un doblete acromático de 60mm que me ha costado 9€. Así que, con la ansiedad en el cuerpo, monté un prototipo de cartón para ver medidas, posibilidades, etc.
Un prototipo de momento:
Tercer acto:
Retomo este post, ha pasado mucho tiempo y lo que iba a ser una guía se está convirtiendo en un telescopio de 100mm.
A medida que avance iré poniendo fotos del proceso.
Y ya, en fase muy avanzada y completamente funcional: